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Comunicado SoMaMFyC
Comunicado SoMaMFyC
Comunicado de la Sociedad Madrileña de Medicina Familiar y Comunitaria en relación con el momento actual que vive la especialidad en la Comunidad de Madrid a causa de la reorganización de la actividad y los puntos asistenciales.
La pandemia de COVID19 está tensionando el Sistema Nacional de Salud como nunca lo había hecho antes. Ante este escenario, nuestro compromiso con la población es mayor que nunca y lo asumimos para y por la población que requiere ser atendida. Sin embargo, estimamos que en este momento crucial que vivimos, como sociedad de referencia en la Atención Primaria de Madrid, debemos constatar algunas circunstancias que nos preocupan. Esta preocupación se refiere a factores tan importantes como son la necesidad de mantener la proximidad y longitudinalidad para con el equipo sanitario de referencia de los pacientes leves/moderados afectados por patología respiratoria, así como para aquellos afectados por patología crónica que requieren un control y un seguimiento estructurado para prevenir agravamientos. Asimismo, cabe señalar que esta situación de pandemia está generando múltiples problemas sociales en la comunidad que los profesionales de los Centros de Salud —tanto especialistas en Medicina Familiar y Comunitaria, como enfermería— podemos detectar mejor, al conocer a nuestra población desde hace años.
De acuerdo con esta realidad y en base a datos propios, hasta un 75% de las consultas presenciales que se producen en los centros de Atención Primaria de la Comunidad de Madrid que permanecen abiertos versan sobre control y complicaciones de las enfermedades crónicas. Diariamente también se atiende más de una decena de pacientes con patología respiratoria adversa, muchos de ellos sospechosos de COVID sin acceso al test.
En este contexto, la línea asistencial que supone la Atención Primaria —mediante las herramientas naturales de las que dispone: control domiciliario, asistencia en Centros de Salud próximos al ciudadano y seguimiento telefónico estructurado— ha sido garante y ahora más aún, de una atención sanitaria orientada a la gradación de las necesidades asistenciales.
Por este conjunto de circunstancias de fondo, la SoMaMFyC desea señalar que:
- El cierre de un volumen tan significativo de Centros de Salud y la reubicación de sus profesionales en otros espacios asistenciales supone, por una parte, la pérdida de un nivel asistencial que permite equilibrar la demanda de atención hospitalaria y urgente, y que puede terminar sobresaturada cubriendo demandas asistenciales que naturalmente deberían ser asumidas por AP. Por otra parte significa un riesgo para la seguridad de los pacientes crónicos frágiles y con comorbilidad, que requieren atención en continuidad y que forman parte de cupos reagrupados.
- Cabe señalar adicionalmente que este modelo organizativo que ahora puede estar resultando eficaz para controlar la punta o meseta de demanda asistencial intensiva, presentará, sin duda a medio plazo, déficits en la atención de las altas hospitalarias. No olvidemos que el control de estas altas deberán ser atendidas en los Centros de Salud en proximidad o en los domicilios, por parte de los equipos habituales de Atención Primaria que, en la actualidad, se hallan completamente reestructurados. Desde la SoMaMFyC queremos manifestar nuestro temor a que no se esté realizando la previsión de esta segunda punta asistencial con la anticipación que se requiere.
- La SoMaMFYC no puede estar conforme, en ningún caso, con las medidas adoptadas recientemente por el gobierno vía la orden SND/299/2020 que implica la prórroga de la formación a residentes de cuarto año de la especialidad de Medicina Familiar y Comunitaria (junto con otras nueve más). Esta formulación entraña una clara discriminación hacia las especialidades que más aportan a la gestión de esta terrible pandemia. Se deben arbitrar las medidas necesarias para que terminen a tiempo su periodo de formación como residentes y se incorporen cuanto antes a nuestras plantillas con las mismas condiciones que el resto de la plantilla.
- Es necesario reconocer que los especialistas en Medicina Familiar y Comunitaria están manteniendo una conducta ejemplar de respuesta a las necesidades del sistema, a pesar de que se ha optado por un modelo de reorganización que no estimamos óptimo. Pero esta situación requiere de médicos formados en una visión integral y generalista y, por responsabilidad y lealtad, las y los médicos de familia estarán allí donde se les requiera con su visión integral general y en continuidad.
- Reclamamos que el sistema dote de garantías de seguridad asistencial a todos y cada uno de los profesionales sanitarios. Por este motivo, es necesario que los responsables políticos garanticen el flujo de suministro de material de protección necesario y homologado para todos los profesionales. Adicionalmente solicitamos que, tanto en lo que se refiere al riesgo personal para los facultativos, como por seguridad de los pacientes, todos los médicos accedan al test de diagnóstico, ya que podrían actuar como posible vector de transmisión hacia población frágil.
Por último, la Sociedad Madrileña de Medicina Familiar y Comunitaria desea agradecer a todos y cada uno de las y los especialistas y residentes de Medicina Familiar y Comunitaria su extraordinario compromiso con los pacientes y la comunidad. Como dijo el presidente de Wonca en uno de sus primeros mensajes sobre esta pandemia, cuando en España las estadísticas no recogían ningún tipo de transmisión comunitaria, “los MFyC somos los primeros en entrar y los últimos en salir”. #FIRSTinLASTout
Madrid, 3 de abril de 2020
Junta de la Sociedad Madrileña de Medicina Familiar y Comunitaria